Textos curatoriales
RIZOMAS. PALABRA REVELADA
Texto curatorial para la exposición “Rizomas. Palabra Revelada” de Cristina Duro en Imaginario Galería, Paraguay 423, Ciudad de Buenos Aires, Argentina, 2024.
En botánica, un rizoma es el tallo horizontal, similar a las raíces, que produce brotes hacia arriba y raíces hacia abajo.
En la década de 1970, los pensadores franceses Gilles Deleuze y Félix Guattari adoptaron el rizoma como concepto filosófico, y transpolaron este término botánico a un modelo descriptivo o epistemológico en el que la organización de los elementos no sigue líneas de subordinación jerárquicas: cualquier punto puede conectarse con otro punto.
En el campo literario, plantearon que, mientras que la estructura clásica de una novela se asemejaba a la estructura de un árbol (en la cual el tronco es la trama lineal y las ramas, las historias que se desprenden de ella), la organización de las novelas con líneas múltiples responden al modelo rizomático; no existe un centro.
Cristina Duro nos presenta en Rizomas. Palabra revelada un conjunto de obras de distintas series y técnicas, que incluyen el trabajo con la bi y la tridimensión. Sus procesos, que implican la impresión, el gofrado, el plegado, el dibujo con bisturí y el grabado, le dan lugar a la huella y a la palabra en distintas formas.
Su modelo también es rizomático, cada elemento en el espacio tiene su lugar, su identidad, su historia. Ninguno es más importante que el otro, su corpus de obra se extiende en todas las direcciones, planteando distintas líneas de fuga.
Rizomas es una obra incontenible, que crece, dice, libera, camina y nos revela otra organización posible como sociedad.
Victoria Villalba
Curadora
Textos de Cristina Duro
Obra "Sanar"
La obra “Sanar” (2022) es un grabado expandido. Se compone de fotograbados experimentales impresos sobre papel (que dispongo de manera bidimensional y tridimensional a través de figuras piramidales) y de purpurina litográfica oro sellada con barniz fijativo.
Con la técnica de gráfica expandida me refiero a la transformación de la imagen impresa por fuera del grabado tradicional, rompiendo preceptos como la bidimensionalidad y la seriación. El proceso de grabado fue experimental porque trabajé directamente sobre el fotopolímero con elementos naturales para luego insolar y revelar. Al no existir negativo previo en el proceso, la imagen resultante es azarosa. El papel utilizado como soporte obtuvo una estampa a partir de las vetas de una madera, y luego fue impreso.
El concepto de la obra se basa en una metáfora de la sanación inspirada en la técnica japonesa del Kintsugi, con la que se repara la cerámica rota con una resina espolvoreada con polvo de oro, dejando a la vista las fracturas. En “Sanar”, las heridas espirituales de una figura humana son reparadas con líneas doradas. La obra versa en torno a la resiliencia, a la capacidad de restaurarnos a nosotros mismos. Las heridas, que no se ocultan, sino que por el contrario, se acentúan y se recuerdan, son la prueba de la imperfección y fragilidad, la capacidad de sobrevivir y de hacernos más fuertes. Un pájaro aparece como símbolo de liberación espiritual.
Obra "Nuestro nido de transformación"
La obra “Nuestro Nido de transformación” (2021) es un grabado expandido, y pertenece al proyecto “Resiliencia”. Técnicamente, se trata de un collage de impresiones fotolitográficas, sobre un soporte de papel de algodón gofrado e intervenido con frottage.
Presento unos personajes que resisten la adversidad de la mejor manera que pueden, transparentando sus posibilidades y proyectando sus ilusiones hacia un mundo diferente. El pañuelo kufiya representa, en este trabajo, la lucha de mis personajes por sobrevivir. Nuestro nido de transformación es un acto de resiliencia frente al mundo que cambió para no volver a ser nunca más el mismo. Y, como el Ave Fénix, desplegamos nuestras alas para sobrevolar este universo en busca de nuestras ramitas de autoestima, con aromas de confianza, aceptación y respeto.
Obra "Un lugar para sanar"
La obra “Un lugar para sanar” (2023) es un objeto intervenido que devino en una obra tridimensional que realicé para el proyecto solidario “Las camitas”, convocado por la Asociación de Artistas Visuales de la República Argentina (AAVRA), el Centro Argentino de Arte Cerámico (CAAC) y el Centro Argentino de Arte Textil (CAAT), a favor del Refugio Uguet Mondaca, un espacio para víctimas de violencia de género.
Inspirada en las vidas y las dolorosas historias que alberga el refugio, concebí la camita como una metáfora del lugar propio. Incorporé diversos negativos fotográficos impresos sobre chapas offset, que uní con Kintsugi, una técnica japonesa con la que se repara la cerámica rota con laca espolvoreada o mezclada con polvo de oro, dejando a la vista las fracturas. Represento el proceso que nace en el refugio, donde desde las cicatrices, visibles, aflora la fortaleza.